Precio de verduras en alza. Crisis ó especulación?

Amigo consumidor, cuando has visitado los mercados en los dos últimos meses habrás notado un incremento en los precios de las verduras, siendo actualmente por citar algunos: pimentón rojo (2,85 €/kg), pepino (1,71 €/kg) y tomate de ensalada (1,52 €/kg). Pero esto no es todo, si comparamos esos precios de verduras con los del mes de marzo, nos damos cuenta que hay un aumento: pimentón rojo (2,83 €/kg) incrementa 1%, pepino (1,70 €/kg) incrementa 1% y tomate ensalada (1,37 €/kg) incrementa 1,10%. Esto es a nivel del consumidor en Canarias (España).
Ahora bien, hagamos un ejercicio que nos dará un resultado escandaloso. Comparemos los precios para el mes de marzo a nivel de mercado con el precio que recibe el agricultor, veamos: el agricultor recibe 1,75 €/kg de pimentón rojo, pero el vendedor final tiene colocado un cartel en su establecimiento con el precio de 2,83 €/kg, lo que supone que en la cadena de intermediarios desde el origen hasta el vendedor final, el precio se multiplica hasta por 1,61 veces, con un margen de beneficio de 61% (sin contar el pago al productor). En el caso del pepino, el precio se multiplica por 3,12 veces al pasar de 0,55 céntimos€/kg al productor a 1,70 €/kg en las estanterías de los comercios, lo que significa que el margen de beneficio fué de 212%. Para el tomate de ensalada, algo más austero, a nivel de agricultor el precio es de 1,11 €/kg y en las estanterías 1,37 €/kg, lo que supone para los intermediarios un margen de beneficio del 23%.
Como podemos apreciar en el cuadro anterior, existen verduras como por ejemplo el pepino, donde el precio se triplica desde que sale del campo hasta que llega a la cesta de la compra del consumidor y esto es verdaderamente "escandaloso". Pero para sorpresas tenemos el repollo donde el benerficio que se obtiene en la intermediación es de 838% y en las berenjenas es de 588%. Esto sin duda términa afectando a los hogares con un presupuesto limitado para llegar a fin de mes y a los agricultores que no alcanzan a satisfacer sus costes de producción, mientras vemos con asombro que los margenes comerciales de intermediación, en el caso de las verduras, apenas bajan.
Ahora bien, haga usted este mismo análisis en su comunidad y si le da un resultado similar, no será por casualidad, llegamos a la misma conclusión.