21 ene 2010

Uso eficiente del agua de riego


Hoy día no se concibe la agricultura ineficiente. Cada vez es más frecuente que los agricultores implementen técnicas para disminuir costes y alcanzar los más altos rendimientos. En relación al agua, se justifica su uso racional por ser un recurso escaso y con un alto costo para el uso agrícola.
La eficiencia en el uso del agua para el riego de cultivos, se puede definir como la relación entre el volumen de agua empleado para satisfacer las necesidades de la planta y el volumen de agua que es extraído por las raíces con ese mismo fin.
Para evaluar dicha eficiencia, es necesario conocer el volumen de agua que consumen los cultivos en el proceso de evapotranspiración y la cantidad de lluvia que en su momento es también aprovechada en el proceso. Estos componentes están a su vez influenciados por factores como el clima, el suelo y las características propias de cada cultivo.
La evapotranspiración se puede estimar por diferentes métodos, pero principalmente se utiliza la ecuación FAO Penman-Monteith, que es considerada el estándar. Para resolver dicha ecuación, se calcula la resistencia aerodinámica del follaje y la resistencia estomática a la transpiración mínima, lo cual depende del tipo de cultivo. Para lograr una buena estimación, es necesario contar con una serie de datos climatológicos, entre otros: radiación solar, horas de luz, temperatura, humedad relativa y velocidad del viento.
El uso eficiente del agua de riego está asociado con la evapotranspiración del cultivo y con el sistema de riego que se emplea en la finca. Para una adecuada planificación del suministro de agua, en las diferentes etapas del crecimiento del cultivo, es necesario realizar una adecuada estimación de los requerimientos hídricos.
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